Cómo gestionar los objetivos incumplidos
Tener objetivos definidos es un paso clave si quieres crecer en tus proyectos personales y profesionales. Idealmente, cuando tienes definidos tus objetivos, te pones manos a la obra y los cumples. Pero sabemos que no siempre es tan simple. En este post te cuento qué hacer con estos objetivos incumplidos para que puedas seguir avanzando.
Los objetivos deben formar parte de tu sistema de productividad. Son el vínculo que existe entre tu misión personal y las acciones de tu día a día. Te ayudan a tomar decisiones, guían tu acción y señalan con claridad cuáles son las tareas importantes.
Establecer objetivos es una manera intuitiva de organizar nuestra vida. Aunque no hayas creado todavía tu sistema de productividad, ni elaborado los objetivos a partir de tu misión personal, seguro que en algún momento te has planteado un objetivo o meta.
Pero tan común como establecer objetivos es tener objetivos incumplidos. El ejemplo más típico son los propósitos de año nuevo o de inicio de curso: una lista de aspiraciones para todo un año, que el 15 de enero está ya olvidada. Haces un análisis de los puntos a mejorar, te anima imaginar tu vida con esos objetivos cumplidos y sientes que tienes la motivación suficiente. Pero, cuando tras 365 días te enfrentas de nuevo a ese momento de cambio y planteas nuevos objetivos, la lista es sospechosamente parecida a la del año pasado.
Los objetivos incumplidos son un lastre para tus resultados. El hecho de no cumplirlos implica que no has avanzado como esperabas y que debes seguir trabajando en ellos. Además, esa lista que parece no avanzar tiene un impacto negativo en tu motivación y puede afectar a otros objetivos.
El motivo de los objetivos incumplidos
Para gestionar correctamente los objetivos incumplidos primero hay que conocer su origen. Hay muchísimas razones por las que no se cumplen objetivos, pero casi todas responden a una de estas categorías:
- Falta de planificación. Plantear el objetivo es sólo el primer paso, una vez que lo tienes debes planear las acciones que te ayudarán a conseguirlo. Poner el objetivo por escrito, incluso colocarlo en un lugar visible, no es garantía de que vayas a conseguirlo. Debes trazar un plan, establecer tareas concretas e incluirlas en tu planificación.
- Definición incorrecta. Hay cierta confusión entre lo que es un deseo y lo que es un objetivo. Los deseos son expresiones vagas de algo que te gustaría alcanzar, pero los objetivos deben cumplir algunas normas. Para una buena formulación, la metodología SMART establece 5 criterios que deben cumplir todos tus objetivos: específico, medible, alcanzable, relevante y con un tiempo definido. Si un objetivo no cumple estas condiciones, es posible que estemos hablando de un deseo, algo demasiado impreciso y poco accionable.
- Objetivo equivocado. ¿Te has preguntado por qué planteaste ese objetivo? Las razones detrás de cada objetivo son muy importantes, por eso es muy útil definirlos partiendo de una misión personal. Pero, aunque no tengas tu misión definida, sí puedes buscar los motivos que hay detrás de los objetivos incumplidos, para ver si son correctos o no. Es muy frecuente fracasar en la consecución de tus objetivos cuando las razones no son las adecuadas. Puede que un objetivo no sea en realidad importante para ti, que sea algo que querías en el pasado, algo que tu entorno espera de ti o incluso una cuestión de apariencias.
¿Qué hacer con los objetivos incumplidos?
El primer paso es la reflexión: piensa e identifica honestamente la razón por la que no has cumplido tu objetivo y comprueba a qué categoría pertenece. Según la explicación que des a cada objetivo incumplido, podrás tomar diferentes medidas.
Si era un objetivo equivocado la solución más sencilla es descartarlo. Si ya no te interesa, no te identificas con él o no crees que te ayude a lograr la vida que deseas, táchalo de tu lista sin piedad. Puede que necesites dar alguna explicación (a ti o a tu entorno) para justificar el abandono del objetivo. Pero no pierdas demasiado tiempo con esto; si el objetivo no es para ti, busca otro que sea más significativo.
Para solventar la falta de definición, debes trabajar con los criterios SMART para conseguir objetivos que sean verdaderamente operativos y te ayuden a tomar decisiones. Necesitas una idea clara para saber qué acciones hay que llevar a cabo y cuáles son prescindibles. Recuerda que absolutamente todos los objetivos pueden definirse usando esos 5 criterios, también los objetivos personales.
Por último, cuando el problema es la falta de planificación, la solución es vincular tus objetivos con las herramientas de organización que utilices. Marca el plazo que te has marcado para cada objetivo en tu calendario. También puedes segmentar los objetivos e incorporar algunas fechas intermedias para ir haciendo seguimiento. La idea es mantener presentes esos objetivos en cada rutina de organización (anual, mensual, semanal y diaria) para que no te olvides de ellos.
Inteligencia emocional para tus objetivos incumplidos
Cuando no consigues algo que te habías propuesto, lo más frecuente es que aparezcan emociones desagradables como frustración, rabia, impotencia, ansiedad, soledad o tristeza. Te propongo que prestes atención a estas emociones para detectar tus patrones y planear tus futuros intentos.
Las emociones perturbadoras o desagradables no son algo a evitar, son algo de lo que aprender. Señalan puntos en los que debes tener cuidado y, si aprendes lo que te están mostrando, podrás utilizarlo en futuras ocasiones. Por ejemplo, si la lista de objetivos incumplidos te genera ansiedad, puede que estés planteando objetivos demasiado ambiciosos o que no te sientas competente. Prueba a poner objetivos más realistas o a reducir el número de objetivos; si crees que el problema está en tu falta de habilidades, plantéate cómo puedes mejorarlas.
Trabaja tus objetivos
Como ves, el autoconocimiento es una herramienta básica para tu productividad. Si quieres mejorar, es importante que reflexiones sobre lo que has hecho hasta ahora. Con estas pautas ya puedes empezar a analizar tus objetivos incumplidos. Es recomendable hacer este trabajo antes de plantear nuevos objetivos. Así evitarás repetir errores y será más probable que cumplas tus propósitos.
El cambio que buscas
Permite que te acompañe en el viaje hacia la armonía y el bienestar que buscas.

Lorena de Diego | Psicóloga
Especializada en problemas emocionales, estrés, ansiedad, falta de autoestima y depresión.
Terapia Online y Presencial (Ciempozuelos y Madrid).